Cómo reconocer una dieta mala y poco efectiva

En la red podemos encontrar todo tipo de dietas.Sin embargo, muchas de ellas no son recomendables, ya que pueden ser perjudiciales para la salud, pues prometen resultados milagrosos en muy poco tiempo.Es por eso que te daremos algunos tips para poder descubrir esas dietas relámpago totalmente ineficaces.

• Demasiado hipocalórica: Cuando una dieta es prácticamente restrictiva y por ende, sumamente baja en calorías, provoca una necesidad en el organismo que tarde o temprano se tendrá que satisfacer, ingiriendo de golpe todos los alimentos con aquellos nutrientes faltantes. Esto suele generar el llamado efecto rebote.
• Es inflexible: Cuando una dieta hace mucho hincapié en lo que se debe y en lo que no se debe comer, entonces no es para nada buena, ya que cada una debe ser adecuada a cada persona. Sufrir demasiado por no comer, definitivamente, nunca será una buena idea.
• Pérdida veloz de peso: Si esto sucede, es una señal de alarma. Suele suceder que los primeros días el descenso de peso sea rápido, pero se debe a la pérdida de la retención de líquidos. Sin embargo, si esta baja veloz se prolonga, entonces prepárate para el efecto rebote.
• Cero actividad física: Si la dieta no incluye rutinas de ejercicios, entonces no es una buena dieta, ya que la misma debe estar siempre acompañada del movimiento.
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• Mucho líquido, pero no es agua: Sabemos que el cuerpo necesita consumir entre dos y tres litros de agua por día, ya que así elimina toxinas y reduce el apetito exagerado. Sin embargo, algunas dietas proponen reemplazar el agua a toda costa por el té o cualquier otra infusión, lo cual no es recomendable. La mejor opción siempre es el agua, luego puedes beber licuados y demás.
• Efectos secundarios: Si una dieta te provoca síntomas adversos, debes abandonarla. Estar constipada, tener dolores de cabeza, padecer mal aliento o sufrir hinchazones de abdomen nunca son buenas señales. No perjudiques tu salud.
• Indicaciones médicas: Cierto tipo de dietas requieren sí o sí la supervisión de un profesional de la salud, específicamente para las dietas las hiperproteicas (altas en proteínas y bajas en carbohidratos) y las proteinadas (carbohidratos prácticamente anulados).
• No es variada: Si una dieta no aporta variedad en lo que se debe consumir, lo más probable es que no funcione e, incluso, que sea perjudicial.